El centro de mi vida. Texto By: borja
Mi corazón empezaba a palpitar...
tan solo al verte cruzar la esquina,
con solo verte pasear por ella,
mi bienquerencia ascendía.
tan solo al verte cruzar la esquina,
con solo verte pasear por ella,
mi bienquerencia ascendía.
Eras una coctelera con receta dulce,
eres una guitarra blanca como la nieve,
eras mi adherencia perfecta,
mi rosita dorada con gotas de aurora.
eres una guitarra blanca como la nieve,
eras mi adherencia perfecta,
mi rosita dorada con gotas de aurora.
Suavizabas el festejo de cada matiné.
Explorabas hasta la más recóndita idea inestable.
No eras la Venus de nada,
Explorabas hasta la más recóndita idea inestable.
No eras la Venus de nada,
incluso ni la era con más
quietud.
Eras la flor engalanada, sin collares de perlas,
porque solo tú eres la joya.
Eras la flor engalanada, sin collares de perlas,
porque solo tú eres la joya.
Esparcías tus baladas por cada
vértice de mi piel.
Mientras yo
acariciaba entre suspiros
los “te quiero” que gritaban
tus ojos miel.
Tú como paloma en la noche,
que hace inmaculado todo,
por donde pasabas.
Tú el amanecer más bello,
que se abría entre los dos montes
más perfectos.
Tus besos en mi boca;
como esa gota candente
que resbala sigilosa
por la suave seda.
Mis besos, siempre como
trotadores caballos de fuego.
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